Empezar el año con la casa limpia, sin ropa que lavar y con la cartera con dinero dentro pero sin papeles viejos y tarjetas que ya no usamos, permite que la energía positiva circule libremente y traiga con ella prosperidad, felicidad y salud. Pero de que sirve limpiar la copa por fuera si no nos preocupamos por que esté limpia por dentro?Además de realizar las acciones para que el sitio donde estés luzca perfecto y de arreglarte para que te veas impecable el día de fin de año, planifica una sesión de media hora para liberarte de memorias que pueden hacer que tus acciones, palabras o pensamientos no sean los mejores.
Para ello haz una lista con todas las cosas que sabes que recordarlas te entristece o te molesta, una vez que la tengas, lee cada una de ellas y limpia tu memoria diciendo de la forma que te sea mas cómoda: Lo siento por la participación que pude haber tenido para que (nombras la situación), perdóname (sutano, mengano y tu mismo) si de alguna forma colaboré para que esto pasara, gracias por darme la oportunidad de crecer con esta experiencia, te amo (y visualiza a todos los participantes inclusive tu mismo sonriendo felices).
Una vez que hayas hecho eso con cada una de las situaciones, quema la lista en un lugar seguro, preferiblemente un recipiente de metal y en la parte de atrás del sitio donde estés (tomando como referencia de base la puerta principal) mientras sientes que con ella quedan reducidas a cenizas todas esas memorias negativas .
Cuando las cenizas estén frías, deséchalas en la calle, sintiendo que todos los malos sentimientos que esos hechos pudieron haber despertado en ti se van con ellas.
Este ritual lo puedes repetir en el año tantas veces como sea necesario. Empecemos el año sin rencores, ni malos recuerdos y así tendremos espacio para recibir todas la felicidad, el amor y la alegría que nos está destinado.
Javier Garcia
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